El presente seminario propone estudiar la construcción de dos alteridades radicales configuradas por la elite cultural cristiana durante el tardo medievo y la temprana modernidad: el santo y el brujo. Notaremos que, mientras el primero constituye el ejemplo del Bien radical, el máximo escalafón del Bien accesible para las creaturas humanas, el segundo condensa todos los rasgos y prácticas perversas imaginables, por lo que deviene en una la mayor expresión humana del Mal. A lo largo del curso se buscará identificar los rasgos esenciales de dichas representaciones, así como su utilidad y funcionalidad entre los albores del Renacimiento y los inicios de la Ilustración. Así, observaremos que ambos polos representacionales se conformaron como caras opuestas de una misma moneda, colaborando en la definición de los límites entre lo natural, lo sobrenatural y lo preternatural.
Cupo máximo: 35
Del 31 de mayo al 26 de julio
Encuentros sincónicos: viernes de 16 a 20 hs