Los proyectos educativos son la concreción de las ideas y deseos educacionales de maestros y directores, funcionarios y académicos, estudiantes y familias. Se anticipan y planifican escenarios, se diagnostican necesidades, se buscan resoluciones, se diseñan implementaciones innovadoras, problematizadoras, y esa prefiguración es el corazón de lo que luego se concretará. Esta posibilidad de construcción permite romper con las determinaciones generadas por la inercia de los grandes sistemas educativos y el peso de las continuidades históricas en educación. A medida que los proyectos se implementan, es necesario realizar ajustes, redefinir las acciones que permitan realizar los propósitos, incorporar nuevos actores, nuevas prácticas, eliminar aquello que no funciona, que obstaculiza. La documentación y registro del proceso en curso es tan importante como el proceso de formulación del proyecto. La reflexión sobre lo realizado colabora en la evaluación en proceso que permite sostener la mejora educativa.
Del 15 de mayo al 9 de junio