Desde su paulatina constitución como disciplina, la Antropología ha generado fecundos debates al interior de las ciencias sociales y las humanidades, contribuyendo a reformular el conocimiento acerca del mundo social y el sentido común que le da sustento. Su encuentro con sociedades ágrafas, primitivas o subordinadas, abrió camino tanto a la reflexión teórica de temas centrales del conocimiento social (tales como la problemática de la racionalidad y del relativismo) como a abordajes metodológicos obligados a innovar en relación a las formas clásicas del paradigma positivista vigente en la época. Esta tradición polémica y desestabilizadora de la disciplina muestra su fertilidad más allá de la transformación de su objeto de estudio clásico (los otros en l os márgenes), posibilitando en el plano metodológico la documentación de la dimensión cotidiana de los procesos sociales (por definición, no documentados). En el contexto actual de convergencia de las ciencias sociales y de las humanidades, la disciplina aporta reflexiones teórico-metodológicas relevantes para el análisis de los procesos sociales que involucran al investigador como un sujeto activo y situado en la producción del conocimiento social, antes que en el establecimiento de pautas precodificadas de investigación social.
Miércoles, 9 a 14 hs., Aula 507 (5º piso)